Los niños de Valencia revolucionan las calles y el gobierno amenaza

Mencionan desde el gobierno valenciano que el primer día de salida de los niños a las calles no ha salido como se esperaba. Demasiadas familias se han saltado las normas y no han cumplido con los distanciamientos mínimos ni las medidas de comportamiento. Por eso las autoridades avisan: ha sido una jornada pedagógica en la que no se han puesto multas. Pero eso no se va a repetir: el lunes habrá multas y si todo sigue igual los parques volverán a cerrar.

El gobierno define el nivel de comportamiento de las normas por parte de los padres y los niños de Valencia como «aceptable» en «algunas zonas». Se habla de lugares como el Jardín del Turia, de espacios de jardines y de las inmediaciones del Palau de la Música, donde no se está solo viendo pasear y jugar a niños en solitario, sino que ya se han visto partidos de fútbol completos entre los más pequeños. Y esto no es lo que buscaban las autoridades, que reconocen que no solo supone un riesgo por la posibilidad de que el coronavirus vuelva más fuerte que antes, sino que también es un detalle muy feo para los cientos de negocios de Valencia que tienen las puertas cerradas por el confinamiento.

La población tiene que entender lo que está ocurriendo y lo que pasa si ellos incumplen las normas. Por ello a partir de mañana la situación va a ser distinta. Se ha dado una oportunidad a las familias para que actúen con cabeza sin tener que ver a las patrullas de agentes recorriendo las calles y los parques. No se ha actuado bien, por lo que en las próximas horas los agentes volverán a patrullar, se impondrán multas y se cerrarán todos los parques y jardines que haga falta para mantener las normas de seguridad impuestas y recomendadas.

Quien haya pensado que ha terminado la hora del sacrificio se encuentra muy equivocado. Y eso se puede decir por todos los niños que han sacado a pasear a sus padres para que puedan hacer running. Ya habrá tiempo de correr, ahora solo hay que correr lejos del coronavirus.